CABRAS
Texto extraido de la página oficial del Ministerio de agricultura, pesca y alimentación
“El ganado caprino se ha explotado tradicionalmente para la producción de leche, carne, pieles y estiércol, teniendo, actualmente, una relevancia productiva muy discreta a escala mundial, comunitaria y nacional, comparado con la de otras especies ganaderas de rumiantes […]”
NO EN NUESTRO NOMBRE
Nuestras cabris no son ganado caprino, ni nunca estarán en el plato de nadie, ni jamás cubrirán con sus pieles otros cuerpos que no sean los suyos propios.
Su vida es suya. Y en el Santu disfrutamos de sus vidas con el respeto y atención que merecen.
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Pepa, junto a Laguertha, formaba parte de un rebaño de cabritas que pasaba cerca del santuario. Nos las cedieron a las dos y ahora son inseparables y corren felices por el Santu.
A diferencia de Laguertha y aun viniendo del mismo lugar, con experiencias de vida parecidas, Pepa tiene un carácter extremadamente social, le encantan los mimos y siempre está buscando caricias. Todxs lxs animales tienen sus distintas personalidades, y nosotras nos adaptamos siempre a ellxs.
Hugo fue un regalo para un niño, como otros tantos animales, pero cuando cumplió los 5 meses ya no lo querían. Llegó al Santu lleno de heridas y muy hinchado por la mala alimentación.
El cambio en Hugo fue enorme, en cuanto se recuperó sacó su verdadera personalidad. Es una explosión de energía y amor, siempre dispuesto a recibir caricias y mimitos y a jugar con todxs sin importar la especie. Disfruta subiendo a los lugares más altos y después acurrucándose junto a sus hermanas al sol para echar la siesta.
Él llena la vida de toda nuestra familia con una alegría contagiosa. Hugo es feliz y nos hace felices. Hugo es…. simple y maravillosamente HUGO!!!!
Laguertha, junto a Pepa, formaba parte de un rebaño de cabritas que pasaba cerca del santuario. Nos las cedieron a las dos y ahora son inseparables y corren felices por el Santu.
Llegó con 2 meses a nuestro hogar y ya tiene 3 añitos. Laguertha no tiene el carácter abierto de Pepa, al contrario, es una cabrita tímida y en general no le gusta que la toquen, solo si llevas comida de la buena buena y en contadas ocasiones. A nosotros eso no nos importa, ella está viva, es feliz, está sana y tiene una buena vida.
Unos chicos que iban de fiesta llevaban a Ximena cogida del cuello como algo gracioso… Obviamente se la quitaron y la llevaron a una protectora de perros y gatos. De allí, las chicas de la asociación PAS se ocuparon de mover el caso hasta que contactaron con nosotras.
Y por supuesto le abrimos las puertas del Santu.
Ximena es una cabra joven y tranquila. Nada que ver con las personalidades alocadas de Hugo, Pepa y Laguertha. Es por eso que convive con las ovejas como una más.